Las personas que tienen que seguir una dieta sin gluten saben lo caro que resulta comprar productos etiquetados libres de esta proteína . Si alguien de la familia tiene que evitar el gluten, que encontramos en el trigo, la cebada, el centeno, la espelta y el kamut, muchas veces el resto de familiares acaban optando por una dieta sin gluten para evitar el riesgo de que se contaminen los alimentos, lo que aún dispara más el gasto en la compra.