El porche, la terraza o el balcón no son cosa, solo, del verano. Llénalos de luz, como se ha hecho aquí, y disfruta de su magia durante las noches de estas fiestas arropado en una manta calentita. Una guirnalda luminosa en la barandilla, farolillos en el suelo, luces en un árbol... No solo decorarás el exterior, sino que a su vez inundarás de magia el interior.